Zimatlán de Álvarez, Oaxaca – El sur de México vuelve a ser ejemplo. Con la promesa de plantar más de cinco millones de árboles, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) arrancó en Oaxaca la jornada nacional de reforestación, una iniciativa que busca combatir el cambio climático… y mandar señales rumbo al 2027.
El evento fue encabezado por Pepe Couttolenc, coordinador nacional de alcaldes del PVEM, quien junto a liderazgos estatales de Oaxaca, San Luis Potosí y Aguascalientes dio el banderazo desde Zimatlán de Álvarez, uno de los municipios clave en organización política y ambiental.
Plantar para transformar
“Queremos que cada voto se convierta en un árbol”, declaró Couttolenc, en referencia a los resultados obtenidos en las recientes elecciones. Bajo esta lógica, el Verde plantea una conexión directa entre participación ciudadana y acciones ecológicas reales.
Las metas por estado reflejan la magnitud del proyecto:
- Estado de México: 750 mil árboles
- Oaxaca: 200 mil árboles
La campaña se extenderá por todo el país durante las próximas semanas, movilizando a simpatizantes, autoridades locales y voluntarios.
Oaxaca, semillero verde y político
Couttolenc destacó que Oaxaca no solo es punta de lanza en lo ambiental, sino también en estructura política. “Es de los estados con mayor organización dentro del partido”, apuntó, reconociendo el trabajo territorial previo a este arranque.
Además, recordó que los esfuerzos de reforestación no serán eventos aislados, sino parte de una agenda ambiental permanente del PVEM en el país.
El Verde podría caminar solo
Más allá de los árboles, el evento también sembró dudas sobre el futuro político del partido. El dirigente no descartó competir de forma independiente en próximas elecciones.
“Sí se puede ganar sin alianzas. Lo estamos explorando”, dijo con firmeza.
Aunque no habló de nombres ni fechas, la declaración deja abierta la posibilidad de un PVEM más autónomo y menos dependiente de coaliciones tradicionales.