Por Juan Pablo Ojeda
Nora Aunor, la legendaria actriz filipina reconocida como una de las grandes estrellas del cine del sudeste asiático, falleció a los 71 años, dejando un legado artístico imborrable que marcó profundamente a varias generaciones.
La noticia fue confirmada por su hija Lotlot de León a través de Instagram: “Marcó a varias generaciones con su incomparable talento, gracia y pasión por el arte. Su voz, su presencia y su arte forjaron un legado que nunca se desvanecerá”. Su hijo, Kristoffer Ian De Leon, detalló que la actriz murió el pasado miércoles, aunque no se ha revelado la causa del fallecimiento.
De cantante a estrella de cine
Nacida en 1953 en Iriga, al pie del volcán Mayon, Nora Aunor (nombre real: Nora Cabaltera Villamayor) creció en una familia humilde. Alcanzó la fama en los años 60 como cantante, antes de dar el salto a la televisión y posteriormente al cine, donde desarrolló una carrera prolífica que abarcó más de siete décadas y aproximadamente 170 películas.
Papeles memorables
Entre sus actuaciones más recordadas se encuentra “The Flor Contemplacion Story” (1995), un drama basado en hechos reales sobre una trabajadora filipina ejecutada en Singapur, y “Himala” (1982), un clásico del cine filipino donde interpreta a una joven que afirma haber presenciado una aparición mariana, papel que se convirtió en símbolo del drama religioso en el país.
Su talento y compromiso con el arte la convirtieron en un referente no solo del cine filipino, sino también de la cultura popular del sudeste asiático.
Reconocimientos y controversias
En 2022, Nora Aunor fue nombrada Artista Nacional de Filipinas, el más alto honor cultural del país, en reconocimiento a su extensa carrera. La Comisión Nacional para la Cultura y las Artes destacó que su filmografía solo es superada por la cantidad de premios y menciones recibidas a nivel local e internacional.
Sin embargo, su trayectoria también vivió momentos polémicos. En 2014, el entonces presidente Benigno Aquino le negó este reconocimiento debido a un arresto por posesión de metanfetamina en Los Ángeles en 2005. Aunque la actriz nunca fue condenada, la decisión desató una ola de críticas por lo que fue considerado un castigo desproporcionado a una figura cultural trascendental.
Un legado imborrable
Nora Aunor fue mucho más que una actriz. Fue símbolo de talento, resiliencia y pasión artística. Su obra ha sido objeto de homenajes en festivales internacionales y su influencia permanece viva en la nueva generación de artistas filipinos. “La echaremos de menos más allá de las palabras y la recordaremos siempre”, expresó su hijo en redes sociales.
El mundo del espectáculo despide a una leyenda cuya voz y presencia seguirán resonando en la historia del cine.